1.1 Antecedentes Históricos
Las comunicaciones existen desde que se creó la
humanidad. Uno de los ejemplos más ingeniosos que muestran la necesidad de las
comunicaciones es el uso de los tambores y humo entre localidades indígenas.
A medida que pasó el tiempo se crearon otras técnicas, es así que en
1834 se el inventó el telégrafo (Samuel Morse) y su código asociado, que consistía en
un número variable de elementos (puntos y rayas) con el objeto de definir cada carácter.
Su uso se limitó a claves manuales hasta los primeros años del siglo XX. En 1874 Emil
Baudot ideó un código en el cual el número de elementos (bits) en una señal era el
mismo para cada carácter y la duración (sincronización) de cada elemento era constante,
este código fue llamado de longitud constante. |